Antonio, Alicia, Angelina, Angelina, el Aleph; discurre.
-Primera exhalación; fuga pneumática; necesario vaciado alveolar para la plétora divina; ángeles en vuelo aeropagita que portan mensaje celeste; sibilar vuelo nocturno precisa el cierre: M . Manuel.
Ostis, Manuel, Marino... :-o Te he leído o escuchado que prefieres un gobierno medieval, en el que por lo menos el cabrón feudal está ahí, en su castillo, identificado, localizable, que un derecho de pernada generalizado e invisible; ¿cómo es un mundo sin jefes?
-Hubo que asesinar millones de campesinos, y robar la propiedad y el cuerpo de millones de brujas, para que naciera la invisibilidad burocrática (el poder oculto no responsable). El lenguaje protege su castillo, la disolución del mundo en el juego huero lacaniano-foucaultiano (v.g.) : es el arma fundamental que usan para esconder lo palpable de la coca que se meten, las prostitutas que pagan, las reuniones en las que hablan y preparan sus genocidios. El “capital”, los “mercados”, la “ilustración”, la “productividad”, el “crecimiento económico”, tienen nombre y apellidos y vida de lujo. Portan una moral muy concreta. Me gusta verme malinterpretado con frecuencia por mi defensa medieval; un mundo sólo puede existir sin jefes si sabes quiénes son, y dónde viven. La inversión del control, del que ellos son hoy monopolistas (mediante la violencia en todas sus versiones: explícita a pequeña y gran escala, y cultural-imaginaria-simbólica…).
Da una lista aleatoria de instrumentos musicales, los que quieras.
-Vista, olfato, gusto, oído, tacto, y la danza sobrenatural con la que bailan en el cosmos.
-Vista, olfato, gusto, oído, tacto, y la danza sobrenatural con la que bailan en el cosmos.
Ésta es difícil porque tendrás muchas; escoge una canción o pieza que te produzca síndrome de Stendhal, que te deje sin respiración y te marees, vaya.
-Ayer fue una pieza tocada por un músico de Mbira, grabada en Zimbabwe en 1973; se me hizo un nudo en la garganta y lloré cuando leí en el libreto que significaba una meditación sobre la piedad en ese pueblo por parte de este músico tradicional, sobre la piedad que nace de la absoluta destrucción. Me pasa siempre con “The Kiss” de Judee Sill, por ejemplo…siento que ese momento se refiere a una misma experiencia humana profunda que comparto con el músico (y el “tercero”).
-Ayer fue una pieza tocada por un músico de Mbira, grabada en Zimbabwe en 1973; se me hizo un nudo en la garganta y lloré cuando leí en el libreto que significaba una meditación sobre la piedad en ese pueblo por parte de este músico tradicional, sobre la piedad que nace de la absoluta destrucción. Me pasa siempre con “The Kiss” de Judee Sill, por ejemplo…siento que ese momento se refiere a una misma experiencia humana profunda que comparto con el músico (y el “tercero”).
En tu trato diario, ¿ha mejorado la educación y cultura de la gente por la mera evolución humana?
-En mi trato diario tengo la experiencia de que el embrutecimiento colectivo es un requisito fundamental para no bajarse de la máquina productora-consumidora. Pero nunca dejo de tener presente que observo víctimas. Los verdugos se esconden, como arriba te comento.
-En mi trato diario tengo la experiencia de que el embrutecimiento colectivo es un requisito fundamental para no bajarse de la máquina productora-consumidora. Pero nunca dejo de tener presente que observo víctimas. Los verdugos se esconden, como arriba te comento.
¿Por qué y en qué es Almería totalmente diferente al resto?
-Es una atalaya muy potente desde donde vivir el límite cognitivo oriental-occidental, un (no) lugar donde es posible la vivencia alquímica la ciudad y la desolación desértica. Además es palpable, vivible: eres abrazado por la tierra, las ramblas te golpean y enmarañan lo poco que eres…y la gente sabe vivir con lo puesto. Han sobrevivido mucho tiempo bajo el desprecio, bajo la explotación del estado colonial que mantienen las élites capitalistas entre el norte y el sur de la península. Oigo claramente, con la misma experiencia de realidad, los ecos de la voz sufí que enraíza este límite en la arena: imposible desarraigar. Almería ya es mi tierra. Me hundo en ella cada día más hasta morir.
-Es una atalaya muy potente desde donde vivir el límite cognitivo oriental-occidental, un (no) lugar donde es posible la vivencia alquímica la ciudad y la desolación desértica. Además es palpable, vivible: eres abrazado por la tierra, las ramblas te golpean y enmarañan lo poco que eres…y la gente sabe vivir con lo puesto. Han sobrevivido mucho tiempo bajo el desprecio, bajo la explotación del estado colonial que mantienen las élites capitalistas entre el norte y el sur de la península. Oigo claramente, con la misma experiencia de realidad, los ecos de la voz sufí que enraíza este límite en la arena: imposible desarraigar. Almería ya es mi tierra. Me hundo en ella cada día más hasta morir.
Mar o montaña.
-Mi sangre es poliglobúlica; necesito la hipoxia y la peña. Mis genes son alpujarreños, me estremezco frente al barranco y levanto mis dedos al cielo cuando subo; pero en el fondo del mar hay montañas más altas, como bien sabes.
-Mi sangre es poliglobúlica; necesito la hipoxia y la peña. Mis genes son alpujarreños, me estremezco frente al barranco y levanto mis dedos al cielo cuando subo; pero en el fondo del mar hay montañas más altas, como bien sabes.
Curar o combatir el dolor (Antonio es médico).
-Primero aliviar al máximo el dolor, y luego lo demás (como praxis diaria, claro, de forma epidérmica). Y luego, por poco que podamos y nos dejen, sanar más que curar. Curamos sólo algunas pocas cosas. Pero hay un imperativo analgésico también alimentado por los mercaderes para que necesites resultados: la cura como un objeto-producto. Sabemos que el mercader y su prestamista son la ameba de la sociedad; esta ameba no está interesada en la complejidad espiritual del dolor y la muerte. Y el mercader y el prestamista están al mando: para vender dispositivos de salud, debes fabricar enfermedad y convencer de la medicina-máquina de generar resultados, la verificabilidad, el avance implacable de la solución científica/capitalista de cualquier problema... Son expertos en esto, en apuntalar ideológicamente esos mitos.
Eres un hombre muy intuitivo y con un gran instinto y emoción, muy en contacto con lo esotérico; ¿tienes alguna visión intuitiva respecto al futuro?
-Veo las últimas fases del capitalismo caníbal, que camina a su desaparición arrastrando la cultura urbana y el mito del progreso, todo ayudado por la autodefensa de Gaia que ya estamos experimentando con impotencia. Veo a la plebe en una fase inminente de fuga mundi, hacia economías precapitalistas , fuga algo parecida a aquella acaecida en la caída del Imperio, pero con mucho más dolor infligido por una nueva forma de fascismo militar-tecnológico que usará la Clase para defender los pocos recursos que queden , y de los que serán propietarios. Queda poco tiempo, y será una época horrorosamente interesante. No estamos preparados. Nos enteraremos sobre la marcha.
-Veo las últimas fases del capitalismo caníbal, que camina a su desaparición arrastrando la cultura urbana y el mito del progreso, todo ayudado por la autodefensa de Gaia que ya estamos experimentando con impotencia. Veo a la plebe en una fase inminente de fuga mundi, hacia economías precapitalistas , fuga algo parecida a aquella acaecida en la caída del Imperio, pero con mucho más dolor infligido por una nueva forma de fascismo militar-tecnológico que usará la Clase para defender los pocos recursos que queden , y de los que serán propietarios. Queda poco tiempo, y será una época horrorosamente interesante. No estamos preparados. Nos enteraremos sobre la marcha.
Hombre/mujer; esta dialéctica.
-La única emancipación posible hoy y ayer, de hombres y mujeres, es redescubrir el misterio femenino de la existencia en cada momento. Para mí el patriarcado es tan tangible como el olor a mierda. Tenemos una banda ideada para cantar el éxtasis de este tipo de emancipación, llamada... Sefronia.
-La única emancipación posible hoy y ayer, de hombres y mujeres, es redescubrir el misterio femenino de la existencia en cada momento. Para mí el patriarcado es tan tangible como el olor a mierda. Tenemos una banda ideada para cantar el éxtasis de este tipo de emancipación, llamada... Sefronia.