jueves, septiembre 08, 2016

Mr JULIÁN HERNÁNDEZ o el λóγος

¿Hacía mucho calor el verano en que naciste o ha llovido?
Igual sí, y de ahí que odie el verano a 40º centígrados a la sombra. Samuel Beckett sostenía que recordaba la temporada pasada en el útero materno. Yo no recuerdo ni dónde puse las llaves hace un rato, así que no me queda más remedio que fiarme de las consecuencias de lo que probablemente ocurrió más que de la memoria.

¿Simpatía por el periodismo?
Más bien por el débil. Y sí que es una profesión apasionante, o eso creo, que yo escribo en periódicos pero no soy periodista. Otra cosa es el estado en el que se encuentra la prensa de más difusión en España hoy en día, en manos de bancos y grupos de presión más bien depresivos. Hay alternativas digitales, eso sí, y eso es bueno se mire por donde se mire. Algunos de mis personajes favoritos son periodistas (el Repórter Tribulete, Tintín, la Rana Gustavo…) así que el gremio en general, excluyendo a algunos tertulianos y columnistas fáciles de adivinar, cuenta con toda mi simpatía.

Colegio Alemán, Johnny, Filología, Conservatorio... Guau.
Se te olvida el Instituto del Calvario en Vigo… Pero tampoco es para tanto, señorita. Dejé Filología en segundo, por ejemplo. Borges decía que la escolarización interrumpe la educación de las personas y estoy bastante de acuerdo. Al final se aprende más de gente que no está en una tarima ni tú sentado en un pupitre. En el caso de la música, el Maestro Reverendo fue uno de mis mejores profesores (y compañeros de barra, dicho sea de paso).

Animalitos; ese tema.
Ah, los animales… Solía mandar pasta al Frente de Liberación Animal británico a un misterioso apartado de correos cuando sólo me quedó esa ideología en algún resquicio del cerebro. A base de radicalizarme, llegué a la conclusión de que los animales son iguales que las personas y, claro, por ahí ya no paso. Ante este dilema, decidí que unos animales me interesaban más que otros. Prefiero a mis gatos antes que a las avispas asiáticas, por ejemplo. Bueno, eso, que son iguales que las personas: unas molan y otras no, como los periodistas o los músicos, que no tengo muy claro que estos últimos sean personas.

¿Qué transportábais Rómulo y tú en Hernández y Sanjurjo?
Nos hubiera gustado llevar en un tráiler caramelos con drogas para repartir a la puerta de los colegios o en un autobús a las coristas del Moulin Rouge; pero no: sólo cargábamos con un puñado de canciones en formato jibarizado de guitarra y acordeón. Que, y mire usted qué casualidad, el Maestro Reverendo fuera el productor de nuestro primer disco, ya fue todo un logro. “De puerta a puerta” era el lema de la empresa y “Privilegios de tener una ocupación inútil” el título que se le ocurrió al Reverendo.

¿Te han dejao flipao las atletas olímpicas o las has visto en las calles, playas y casas muchas veces?
Ni idea de atletas, atletos, futbolistas, futbolistos y toda esa gente que siempre acaba lesionada de por vida (¿o acaso conoces a algún deportista que no esté medio tocado?). Reconozco que hay plantas de quitar el hipo: si se hubiera pintado de azul, Michael Jordan hubiera sido el Dr. Manhattan, por ejemplo. Pero prefiero una caída de ojos a un músculo, una voz seductora a un récord o un liguero a ese horror del voley playa femenino. Y todo esto está en las calles y en las casas (la playa es que no la piso ni por una apuesta).

Un brainstorming de autores/as favoritos (música, arte, poesía, literatura...), por favor.
Porque me lo pide usted, pero esto no me va a salir en condiciones. Aleatorio tiene que ser necesariamente; y además mañana puedo cambiar de opinión y quedarme tan ancho. Va a voleo (como el voley playa femenino) y tres por categoría: Charley Patton, Eric Dolphy, Igor Stravinsky; Francis Picabia, Anselm Kiefer, Eva Hernández (sí: es mi hermana, ¿qué pasa?); César Vallejo, Clara Janés, José-Miguel Ullán; Flann O’Brien, Rafael Cansinos Assens, George Perec. Y, ¡hala!, un montón de clásicos a la basura. Ya digo que mañana cambia todo y al carallo.

Algo que no me quiero llevar a la tumba por si bailas sobre ella ;-) ¿Habías leído "Lo Fatal", de Rubén Darío, cuando escribiste "Quiénes somos, de dónde venimos" de Siniestro Total?
¡Oh, caramba! Pues es más que probable, ¡pero no lo recordaba! Lo acabo de (re)leer y no me ha quedado más remedio que ir a por una cerveza a la nevera y liar un cigarrillo, que estas cosas hay que meditarlas en condiciones. A Rubén Darío, ese señor de trago fácil, tuve (y yo feliz) que leerlo in illo tempore. Que se me quedara ese verso en algún lugar del disco duro ya no lo sé. No fue la intención citarlo, desde luego, que otras veces sí lo es. Las tres preguntas las utilizaba Pepo Fuentes para burlarse de alguien que se ponía intenso y trascendente, y de ahí la canción. What a flash-back!

¿Es el λóγος (logos) adictivo, no tiene remedio, NO TENEMOS REMEDIO, DIOS SANTOOO???? :-)
No, en serio: el logos no es adictivo. Lo que produce adicción son los aditivos y excipientes con los que llega al mercado. Y nosotros, que somos unos adictos compulsivos, vamos y pagamos por ello. Remedio no tenemos, claro que no. Tampoco el logos. Por cierto: ¿qué es el logos?
El λóγος es la palabra, el verbo, la idea, la razón, la lengua, la comunicación; de ahí todas las -logías, ¡que no las logias! :-)
Pues eso es todo, querido y admirado Julián, muchísimas gracias por tu legado, por el enorme disfrute que nos ha procurado y por seguir en activo; ¡muchos besos!!! Alicia X
¡¿Legado?! Eso no me lo dices en la calle. ¡Gracias a ti! Más besos de vuelta.
¡¡¡Mamáaaaaaa!!!! ;-)