Pues claro, siendo Shin-Chan uno de los ídolos de Marino, éste practica sin cesar esta misma técnica pero ante los tres diminutos Yorkshire de mi madre, osease, su abuela, consiguiendo solamente que los tres canes le observen atentamente, eso sí, pero con brillantes ojos de no entender nada en absoluto.
Otra estupenda idea que Marino Burillo Navarro extrajo de sus dibus favoritos hizo que tooooooooda la urbanización en la que nos alojábamos temporalmente ("Playa de Baria") nos conociera mucho mejor y muy entrañablemente pues al pequeño actor y cantante le dio por subirse a la última planta, una azotea que la dueña tiene monísima, desde cuya dominante altura gustaba de entonar, a pleno pulmón, lo siguiente:
¡MAMÁ TIENE EL CULO GOOOORDO
PAPÁ BEBE MUCHO ALCOHOOOL
MAMÁ VA ESTREÑIDA AL BAÑOOO
Y ESO LE DA DOLOOOOOR...!
¡Y SU MAL HUMOOOOOR!
Pero no contento con esta contundente performance, al subirse al coche de su abuela y los perritos para ir a alguna parte repetía esta misma coplilla sacando la cabeza por la ventana mientras se desgañitaba y paseaba tranquilamente su tierno mensaje por todo el pueblo.
¿Dios mío, qué es lo que hemos hecho mal?
Besos,
Alicia XX