Alcalá 31. Ayer, siete de la tarde. Abajo, junto a la caja fuerte. ¡estaba entreabierta! ¡¡pero era de pega, Diego, nos has vuelto a engañar, con lo bien que nos hubieran venido 300 kilos de euritis!! Le di una preciosa rosa naranja a D.A.M. (¡fijaos, en la foto!; qué pelota, ¿verdad?) para que recordara lo hermosa que es la vida y se cuidara algo más. Estaba nerviosa, básicamente porque fui sola -Pejo se quedó con el microbio-, porque hacía tiempo que no veía a Diego Apunto y porque iba a conocer a Jose Manuel Costa en cuya página, "La Tostadora", me paso media vida... Jose Manuel se ajustó bastante a lo que yo esperaba de él y, además, al ser tan educado, atento y caballeroso, con un buen par de... orejas, me hizo sentir bien. Conocí también a Patricia Godes, quien me encantó que estuviera allí porque a) era la única fémina en la mesa y b) su intervención añadió matices precisamente de los que aportaría una mujer respecto a la forma de maquearse del personal y también respecto a la arbitraria e injusta elitización y sacralización de algunos personajes y círculos de entonces, y hasta ahora. Los que veis a la derecha en la foto son Nacho (ex Nacha Pop), quien nos sorprendió gratamente por tener muy buen aspecto -mejor que entonces, le dijimos- y por estar bien y "Charly", de Dro, quien, como Nacho, nos contó su día a día de entonces, de músico, de "movido", de conocer a gente y mezclarse con ellos, tocar, hacer todo tipo de cosas, entrar en DRO, trabajar en ese ámbito, etc.En un momento dado se produjo un pequeño "cisma" en la mesa y entre el público: ¿nostalgia? ¿balance positivo o negativo? Diego Manrique defendió hasta cierto punto el derecho a la nostalgia (D.A.M. es muy cariñoso en todo...), encontrando eco entre los asistentes, mientras que Costa, Patricia Godes y yo ejercimos de "bordes" y sostuvimos que hubo allí también mucho cutrerío, sobredimensionamiento, drogas a tuti plen (y así quedó mucha gente) y hasta gran violencia a veces. También propuestas muy innovadoras e interesantes, sobre todo en música y luego en todo lo demás (diseño, arte, cine...), que estos asenderados periodistas recogieron e impulsaron con prontitud desde sus respectivos medios.
Fue agradable, y eso que os aseguro que no es fácil sentarse a esa mesa de la foto, que desde luego no es redonda, y disertar y debatir acerca de un tema tan suigéneris y escurridizo.
Tuvimos la suerte luego de encontrárnoslos a todos -visite nuestro BAR- y beber cerveza y charlar animadamente durante un buen rato.
Y, como veis, la foto ya no me ha salido "movida" porque no iba colocada, como nos recomendaba el alcalde de Madrid entonces.
Besos y abrazos,
Ali Ciente XXX
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