
Luego he sufrido, como todo el mundo, las caóticas y angustiosas informaciones diarias respecto al caso. La empatía es un sentimiento inmediato e invasor -afortunadamente- que hace, en mi caso, que sufras por la niña, por los padres, por los gemelos, por los amigos, por la familia, por la policía, inmediata e intensamente, así que, entre este noble sentimiento que la mayoría poseemos y la hiper cobertura mediática, no ha habido forma de quitarse el asunto de la cabeza por mucho tiempo.
Pero ahora sólo pretendo aportar algo, si puedo: el blog de Gerry McCann, padre de la niña -http://www.findmadeleine.com/-, que contiene enigmáticas frases que hacen pensar que los padres saben algo ("Cualquiera que sepa lo que pasó el 3 de mayo sabe que Kate -la madre- es completamente inocente") y una página a la que me han referido que, además de publicar las fotos de unos cien niños y niñas desaparecidos en todo el mundo sólo en este año, explica y sostiene la tesis de al menos un funcionario corrupto entre la policía portuguesa a la que implican directamente en la desaparición de la pequeña Madeleine McCann (http://master-of-fate.spaces.live.com/).
Vean y juzguen; o, al menos, ¡inténtenlo!
Con esperanza, todavía,
Alicia XX