He tenido una de esas ocasionales menstruaciones del tipo exagerado, con abundante derramamiento de sangre y dolores inconcebibles que he procurado mantener a raya con analgésicos. Cuando esto pasa, me veo obligada a anular todos los compromisos y quedarme en casa intentando leer, escribir o lo que sea, pero salir, ¡no, gracias!, lo que me ha fastidiado bastante por el -extraño- buen tiempo que hacía fuera.
En casa estoy muy agusto con Pejo y Marino; dos guapos y espigados muchachotes con los que da gusto estar (siempre doy gracias por esto al Monseñor Rouco Varela y a don Mariano Rajoy).
Lo que más me ha fastidiado ha sido tener que anular la clase de guitarra; estamos en plena recta final para la grabación y espero estar totalmente bien, al menos, para el ensayo de mañana y el del martes; o al menos encontrarme lo suficientemente bien para poder practicar en casa. El disco nos importa mucho; llevamos, a lo tonto, haciendo música toda la vida y si grabamos por fin queremos que sea hermoso y súper interesante, porque si no, ¿para qué? Esto me recuerda de repente al maravilloso What´s good de Lou Ruíz:
What good is life without living
What good´s this lion that barks
You loved a life others throw away nightly
It´s not fair, not fair at all
What good´s this lion that barks
You loved a life others throw away nightly
It´s not fair, not fair at all
Así que, a pesar que hay fiestas (la de Magüu, la de Ladyfest), conciertos (Hurta y Cordel, Trío Antimanierista, etc.) y varias cosas más, me da a mí que nos vamos a dedicar a cuidarnos, a disfrutar tranquilamente de la vida, a practicar siempre que podamos y a hacer el amor todo el tiempo (aprovechando que no va a estar el pequeño grumete).
Y eso es.
Un beso,
Alicia XX