La vida diaria en la red, al menos desde el punto de vista de una "blogger" de pura cepa como ésta que escribe, es altamente gratificante y por tanto muy adictiva. Por ejemplo, desde la universidad, es la primera vez que me vuelvo a encontrar referencias cruzadas acerca de cosas y asuntos que no sólo me interesan, sino que directamente me apasionan (claro, también es que yo soy apasionada así ya, de fábrica!). Mi ronda habitual de blogs -los blogs son mis fenómenos favoritos en la red, bastante por encima de las normalmente más estáticas "webs"- incluye echar un ojo a las portuguesas Braganzzzza Mothers, donde encuentro las imágenes más impactantes y atractivas, y a los blogs de Estufacto -el más cool, para mí-, Zoquevo, la Tostadora de J.M Costa, el de mi querido AltoVolta, con sus ocurrencias de cine y música y la Coctelera de Stavrogin, con sus sesudos y académicos "estudios", más que posts al uso... Esta es, decía, mi agradable ronda habitual, y me consta que el embrujomarino forma parte de el paseíllo de muchos de ellos también... (me dejo algunos, ¿eh?, como a Plunderphonics; muy cool este también).Ayer, por ejemplo, me llevé, al menos, tres agradables e interesantes sorpresas gracias a este nuevo ecosistema cibernético: uno, le corrijo a Estu una referencia a una canción de Hendrix que interpretó Tony Joe White en sus recientes conciertos en España (Madrid y Barcelona) porque veo que pone "Woodoo Chile" (en lugar de "Child"); pues va el tío y me pone un vínculo a una portada de disco -de Hendrix- que efectivamente reza "Woodoo Chile"!!!! (ver aquí).
En la página de Stavro me encuentro con una magnífica foto de doña María Zambrano y eso me hace correr a la red de redes a refrescar mis recuerdos acerca de esta enorme señora; y allí me encuentro con mi también admirada Chantal Maillard hablando de la Zambrano y me entero, de paso, de cosas sumamente interesantes y sugerentes que me abren el apetito de forma muy saludable...
Y, finalmente, el otro día trabé conocimiento con un lector, italiano afincado en París que se hace llamar "algonuevo", gran admirador, como yo, de la Holliday, quien me deja un agradable comentario que me hace meter las narices en su blog a ver qué se cuece por allí, con tan buenísima fortuna que me encuentro con un maravilloso poema de mi admirado J. L. Borges, tiulado "El remordimiento", que me deja ya mirando a Barcelona (es decir, a París...)
Y eso es, chicos; ayer, que no pude salir, estos pequeños grandes descubrimientos, junto con mi familia y otros amigos y contertulios, me llenaron el alma como esta persistente lluvia de noviembre está haciendo con nuestros antes sedientos pantanos...
¡¡Únete a nosotros, machote!!
Por Alixxx
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