martes, enero 02, 2007

BABEL

Brad Pitt está magnífico. Este actor, al que llevamos viendo crecer toda la vida, desde que era un mocoso del "brat pack", pasando por un montón de papeles de casi payasete, o amarihuanao, o pistolero, o espía, o de casi todo, hasta el pedazo de actorazo y hombre en el que lo vemos convertido ahora. No excesivamente guapo en esta peli -sí imponente-, caracterizado de hombre algo mayor, pero con la sensibilidad y la dureza intactas (sensibilidad + dureza, una combinación difícil de resistir). Su compañera, Cate Blanchett, está también espléndida a pesar de una clara imprecisión del guión y del diálogo en lo que respecta a su personaje. Ella misma se lo planteó así al director (el mejicano Alejandro González Iñárritu): "... ¿qué hago yo aquí, con un personaje con tan poco tiempo y diálogo en la pantalla?...".

La cinta es un poco tramposa porque involucra tantos dramas, incidentes y situaciones trágicas que es biológicamente lógico que el espectador quede noqueado a la menor de cambio y, claro, el impacto ya está conseguido! (a poco que haya algo de oficio, que lo hay). Richard y Susan (Brad y Cate) están en una salvaje y subdesarrollada Marruecos, intentando superar una crisis por la muerte de uno de sus pequeños (por lo visto, el propio director sufrió enormemente por la muerte de su propio hijo), cuando ella, inopinadamente, recibe un tiro en el cuello mientras van en autobús.

El origen de ese disparo, otra historia trágica, la de dos niños a a cargo de unas ovejas y de un peligrosísimo rifle que les ha confiado su paupérrimo padre, a quien a su vez se lo ha proporcionado... alguien en Japón con otra historia dramática a cuestas que se entrelaza con las otras tres (la de la depauperada familia marroquí, la de los norteamericanos Susan y Richard y la de Amelia, la niñera mejicana de la pareja que decide cometer la locura de cruzar la frontera con los dos pequeños para no perderse la boda de su hijo).


Mi historia favorita, por lo moderna, por la mayor complejidad y gama de matices que consigue trasmitir, la de la adolescente / jovencita japonesa sordomuda Chieko (Riko Kikuchi), incluidos los personajes y actores de su padre y del agente de policía con el que se ve involucrada.

Mi puntuación: 5´5 ó 6, pero, chicos, visto lo que hay en cartel, pues hay que bajar un poquito el listón!

Besos y feliz año de nuevo,

Malicia Cool XXX